A lo largo de estos meses, hemos ahondado en la Inteligencia Artificial en términos amplios. En este artículo, nos centraremos en su uso en la industria del transporte.
Su utilización ha transformado el sector del transporte, buscando la máxima eficiencia posible, mediante la optimización de las rutas, predicción de la demanda solicitada por el público objetivo o la gestión de las flotas.
En particular, en el transporte por carreteras, el uso de la Inteligencia Artificial permite mejorar la seguridad, optimizar el combustible e incluso pensar en la conducción de manera autónoma.
O, para el caso del transporte de mercancías, la agilización de la logística, reducción de costes o tiempos de entrega, entre otros, por lo que la Inteligencia Artificial está centrada actualmente en la seguridad, eficiencia y planificación.
Hoy en día, existen numerosas aplicaciones de la Inteligencia Artificial en el mundo del transporte, siendo las más relevantes algunas de las que a continuación se mencionan:
- Gestión de la cadena de suministro: Optimizar la planificación logística, rastrear envíos en tiempo real, predecir la demanda o ajustar los niveles de inventario de manera eficiente.
- Optimización de rutas y programación de flotas: Los algoritmos de la Inteligencia Artificial pueden analizar grandes conjuntos de datos para identificar las rutas más eficientes, minimizar los tiempos de viaje y reducir los costes de combustible y mantenimiento.
- Conducción autónoma: La Inteligencia Artificial impulsa el desarrollo de vehículos autónomos lo que mejora la seguridad vial, reduce los accidentes y optimiza el uso del espacio en las carreteras.
- Gestión de tráfico: Los sistemas de Inteligencia Artificial pueden analizar datos de tráfico en tiempo real y predecir congestiones, coordinar semáforos y señalización, así como optimizar el flujo de vehículos.
- Mantenimiento predictivo: La Inteligencia Artificial se utiliza para monitorear el estado de los vehículos y predecir cuándo es probable que ocurran fallas, lo que permite programar el mantenimiento de manera proactiva y reducir los tiempos de inactividad.
- Atención al cliente: Los Chatbots impulsados por Inteligencia Artificial pueden brindar asistencia y soporte a los clientes en tiempo real, responder preguntas frecuentes y facilitar reservas y seguimiento de envíos.
- Optimización de precios y gestión de ingresos: Los algoritmos de la Inteligencia Artificial analizan datos históricos y en tiempo real para ajustar dinámicamente los precios de los servicios de transporte, maximizando así los ingresos.
- Seguridad y cumplimiento normativo: La Inteligencia Artificial permite monitorear el comportamiento del conductor, detectando actividades sospechosas o peligrosas y garantizando el cumplimiento de las regulaciones de seguridad vial y ambiental.
Por su parte, esta aplicación de Inteligencia Artificial conlleva numerosos beneficios como puede ser la optimización de las rutas, reducción de gastos, mejora de la seguridad y experiencia del cliente, así como reducción de emisiones.
Ahora bien, también trae consigo desafíos relevantes en donde los Departamentos Jurídicos debemos estar preparados para ellos y, en este sentido, se encuentra la escasa regulación y políticas de ello o la interoperabilidad, brechas de seguridad o, sesgos discriminatorios.
En conclusión, la Inteligencia Artificial mejorará la eficiencia, seguridad y experiencia del usuario. Sin embargo, también presenta desafíos, los cuales deben ser abordados por especialistas en la materia.