Apple está en conversaciones avanzadas con Google para licenciar una versión personalizada de Gemini que refuerce Apple Intelligence y potencie la próxima gran evolución de Siri. El modelo, que los reportes sitúan en torno a 1,2 billones de parámetros, se ejecutaría en la infraestructura Private Cloud Compute (PCC) de Apple, con foco en privacidad y control de datos. El acuerdo aún no está cerrado y Apple mantendría sus propios modelos en paralelo, con la idea de poder reemplazar Gemini más adelante si su tecnología madura al nivel necesario.
Desde WWDC, Apple posicionó Apple Intelligence como capa unificadora de IA, combinando modelos en dispositivo con cómputo seguro en la nube (PCC) para tareas complejas. La posible entrada de Gemini encaja con esa arquitectura: terceros de “alta potencia” corriendo dentro de los centros de datos de Apple, sin que Google pueda acceder a las solicitudes de los usuarios. [The verge]
Cómo te afecta (lo tangible para el usuario)
- Un Siri que por fin “entiende lo que querías decir”: más contexto, seguimiento de conversaciones y planificación de tareas en varios pasos (resúmenes, agenda, coordinación entre apps).
- Automatizaciones más finas: atajos y rutinas que combinan apps, recordatorios y señales del sistema sin microgestión constante. Privacidad como bandera: las peticiones que requieran modelos grandes se procesan en PCC; Apple asegura que ni Apple ni terceros acceden a los datos personales usados para cumplir la solicitud. [Reuters]
- Coherencia de ecosistema: iPhone, iPad y Mac compartirán un “hilo” de contexto para que Siri actúe de forma consistente entre dispositivos y apps.
Los detalles que marcan la diferencia
- Modelo y parámetros: los reportes hablan de un Gemini ~1,2T parámetros, con arquitectura Mixture-of-Experts (se activan “expertos” parciales por consulta). Beneficio: potencia a demanda y costes de inferencia más contenidos.
- Ejecución en PCC: Apple habilitó controles técnicos y auditoría para extender su promesa de privacidad al cómputo en la nube. Es el pilar para “traer” modelos muy grandes sin exponer datos.
- Plan B de Apple: la compañía sigue entrenando modelos propios para funciones en dispositivo y servidor; abrirá más capacidades a desarrolladores y mantiene la puerta a múltiples modelos. Traducción: diversificación ahora, sustitución posible más adelante.
Lo que no hay que perder de vista (riesgos y tiempos)
- No hay acuerdo firmado: hablamos de una negociación avanzada; la cifra de ~1.000 M$/año y la ventana temporal provienen de reportes, no anuncio oficial.
- Calendario realista: Apple ya ha reconocido que parte de las mejoras de Siri se mueven a 2026. Incluso con Gemini en PCC, el despliegue será gradual.
- Gobernanza y cumplimiento: más autonomía para Siri implica más responsabilidades en trazabilidad, seguridad y control de errores (clave para entornos profesionales).
Si el acuerdo se cierra, Siri pasará de asistente reactivo a mayordomo proactivo que entiende contexto y ejecuta cadenas de acciones, con privacidad como ventaja competitiva. Pero hasta que haya anuncio formal y despliegue efectivo, conviene gestionar expectativas y preparar la casa: procesos, datos y controles.


